Octubre del 2015.
Oh nena
no sabes lo difícil que es manejar a casa
con el tráfico de la hora pico
y los policías de Emetra silbando acordes
de una sinfonía agitada después del trabajo
no hay Triphop que calme mis ansias
ni Afrobeat que disipe la rabia en mis colochos
sentado voy solo
en el asiento del Fiat
que cada vez se hace más viejo
mientras los hombrecitos
del Peugeot de al lado
tocan sus bocinas como hienas furibundas
y un Mazda me da paso
acelero
me hago a un lado
un camión de helados
lanza fuego porque no doy vía
no quiero dejar pasarlo
quiero llegar a tu Electro
a tu Bossa Nova cósmica
en el Transmetro van silentes
todos los pasajeros que parecen sombras tristes
espectros de otro día mutilado hasta la médula
yo quiero estar a tu lado
bailando Cut Copy o Depeche Mode
hasta que el sol inunde nuestros ojos
después de una noche de Deep House
zumbándonos las zapatillas grises y
los ademanes torcidos
por la lenta caracola
que es el deseo gimiendo espasmos
en nuestras tibias nervaduras
Oh nena
quisiera escribirte algo solemne
contarte por ejemplo
que todo va a estar bien
después de este tráfico insolente
que no hay rola de Soda
en la que no te apriete a contra recuerdo
o que en la voz de Alex Turner
encontré tu risa dormida el otro día
pero el tráfico es mortal
y es mordaza como una serpiente enajenada
de luces y conos y bocinas
me desespero en grupo
pero voy solo en este infierno de pedales sin vino tinto
busco un cigarro
apago el radio
veo el celular
volteo al Toyota
de mi derecha
me saca el dedo
me manda al diablo
quisiera detenerme
y esperar que tu risa ilumine mi noche
apenas son las 6
y tengo que terminar unos pendientes
ordenar mi ropa
fumar cigarros
intentar dormir
con el brillo de tu ausencia
Oh nena
quiero llegar a casa para escribirte
para poner el nuevo disco de Beach House
y encerrarme en naderías
donde el bien y el mal no existen
¿Estás ahí? ¿Sigues leyendo este delirio?
Yo voy a 4 kilómetros por hora
y la voz de Waze me desespera
quiero descansar
y empezar a editar mi nuevo libro
que debo entregar a finales de septiembre
no puede ser que el tráfico de la hora pico
pique nuestros sueños y los consuma
no puede ser que la felicidad
esté atrapada en un recuerdo
de días y canciones olvidándose
no puede ser que estas palabras
poco a poco
se desintegren
con el mejor Shoegaze o el Dream Pop
que sólo tú me conoces de memoria
Ya crucé La Reforma
y el diluvio de policías
es una diatriba anestesiada en furia
si nadie llevara prisa
podría jurar
que todos se bajarían de sus carros
a somatar sorpresas con caramelos agrios
sobre sus cascos oficiales
voy llegando a La Séptima
enciendo el radio
pongo un disco que grabé
hace unos días
2 canciones de Arcade Fire
1 de Bowie
3 de The xx
y ya voy cantando
estoy a pocos metros de mi casa
y todo parece un infinito indeleble
de prosas paciencias y poemas
La lluvia cae
bajo por la rampa
estaciono el carro
y empiezo a escribirte
como un desesperado
en el bloc de notas del teléfono
al mismo tiempo
una canción de Nick Drake
irrumpe con su risa teórica
son las casi 7
y después de una hora de cruzar los dedos
y surcar los mapas de la ira
puedo decirte:
no puede ser que la felicidad nos dure tan poco
tan poco puede ser que la felicidad nos dure no
y así hasta que vuelva a verte
en mis sueños donde existes.